Este verano me compré las segundas sandalias cerradas por delante Timberland GSR. Las primeras me dieron muy buen rendiemiento varios años. El modelo actual presenta una innovación antifatiga con unos hoyuelos en la parte del contacto con el pie. Realmente son cómodas, pero a las pocas horas de llevarlas puestas provocan muy mal olor de pies. Nunca había tenido problemas con el mal olor de mis zapatos. He hablado con otros conocidos que tienen el mismo modelo y todos se quejan de los mismo. La goma que está en contacto con el pie no es válida.