En octubre de 2011 llevé un móvil Samsung Wave S8500 de menos de un año de antiguidad a Movistar para su reparación, ya que se apagaba solo con frecuencia y la batería duraba muy poco. Tras 3 semanas en el servicio técnico de Samsung de Getafe (Madrid) recogí el terminal de Movistar de nuevo, y resultó que el Servicio Técnico había señalado que el teléfono estaba irreparable, y que la place base se había mojado. Ya que en ningún momento lo había mojado yo, lo llevé al Servicio Técnico de Sevilla (San Eloy) y el técnico me enseñó que el teléfono estaba mal ensamblado y que faltaba varias piezas. Según éste, ahora sí que estaba irreparable. Me puse en contacto 2 veces con Samsung a través de su página web y recibí 2 emails en que se negó a respetar la garantía, así como a reparar los daños efectuados por su propio servicio técnico, aduciendo que había una limitación de plazo de 48 horas para reclamar.